En la tarde del domingo, en un barrio clásico de Santiago De Chile... Barrio Lastarria, Carabineros multando a un organillero por tocar en la vía publica. Insólito, pero cierto.
Se juntó un montón de gente, quien respetuosamente intentó interceder ante la "autoridad' y explicar el sentido de tradición y cultura popular que los organilleros tienen en nuestro país. No hubo ni siquiera la intención de diálogo. Ante la perplejidad de la gente que se juntó, alguien tuvo la iniciativa de juntar plata para ayudar al organillero a pagar el parte o multa. Frente a mis ojos y con una cara de impotencia que no puedo explicar, el organillero rompió el parte o citación y se fue entre la gente que se había juntado, sin parar y sin mirar atrás. Todos nos quedamos mirando, mientras el organillero doblaba la esquina para perderse en el forestal.
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